El proyecto Tierras Altas de Tanzania, desarrollado en colaboración con Agrónomos Sin Fronteras, supuso la constitución de una cooperativa para la explotación de una plataforma de tratamiento post-cosecha y de almacenamiento de producto que sustenta a 6.000 personas y amplía su ámbito de influencia hasta los 30.000 beneficiarios indirectos en la zona de Pawaga. El programa parte de la idea de que la mejor forma de luchar contra la pobreza y el hambre en comunidades agrícolas reside en ofrecer a las familias la mejor formación posible en técnicas de cultivo y ganadería.
Con este modelo como referente, el proyecto Tierras Altas se extendió al área de Kilolo en una segunda fase, donde la agricultura, la ganadería y la fruticultura son las principales fuentes de abastecimiento de sus habitantes. Los logros obtenidos servirán a otras áreas del país como ejemplo de experiencia de trabajo agrícola eficiente